¿A qué llamamos un plato saludable?

Que un plato lleve de todo no es sinónimo de saludable. Cuantos más ingredientes más confusión para el estómago a la hora de digerirlos. Y lo que no se puede digerir no nutre, por sano que sea. 

En vez de mezclar más de 5 alimentos  a la vez en un solo plato  es mejor ir variando de alimentos a lo largo de la semana. Esto favorece la nutrición y la digestión de un estómago que a los 15 años tritura una piedra, pero a los 35 años digiere lento y a los 50 necesita ayuda.

Hay que considerar también que la calidad nutritiva de los alimentos para Ayurveda no se basa en los minerales, vitaminas, fibras o azúcares. Se basa en los 6 sabores y en la cualidad ligera o pesada, seca o jugosa, fría o caliente del alimento. Significa que cuantos más ingredientes lleve el plato más difícil es que haya compatibilidad entre ellos y por tanto es menos saludable.

Como las noches suelen ser el momento catalogado de “merecido”, después del largo día de trabajo, para beber, comer y ver la TV, solemos comer algo rápido, envasado o precocinado para evitar poner los pies en la cocina. Sin embargo, la noche es el momento más delicado del día por estar relacionada con los ritmos biológicos de absorción y depuración del organismo. 

Por eso, lo lógico sería no cenar no más tarde de las 19:00 ligero, calentito y saludable. Para esto una opción son las cremas:

Solo necesitan 30′ para estar listas sin necesidad de enriquecerlas con nata o con otras grasas para que tengan sabor. 

Esta receta base es válida para todo tipo de cremas, donde lo único que cambia de una a otra es su ingrediente principal:

-LLevar al fuego la olla hasta que coja calor.

-Añadir el aceite de oliva VE y dejar que coja temperatura.

-Cortar puerros, ajo y cebolla. Añadir al aceite y dejar que se doren.

-Añadir sal y pimienta. Y comino que va muy bien para equilibrar Vata -dosha normalmente en exceso a partir de los 45-.

-Un poco de tomate cortado en pequeños trozos. 

-Añadir el ingrediente principal. Los vegetales estrella de esta temporada nos permiten cremas riquísimas de calabaza, de alcachofas o de setas entre otros.

-Saltear hasta que se doren.

-Triturar y listo.

Pueden ir acompañadas de un topping crujiente del mismo alimento principal y de una tostada. 

Aunque es preferible la comida acabada de cocinar -en todos los aspectos-, es preferible cocinar para dos días que tomar cremas envasadas y procesadas -si creemos que la comida envasada con fecha de caducidad a un mes vista mantiene sus nutrientes, estamos locos-.

Comer no es algo que hay que hacer para llenar un tiempo muerto. Comer es la base de nuestra supervivencia y el pilar fundamental de un presente y futuro saludables.

Con mis mejores deseos.



Sopa shiitake sin miso

La sopa miso es evidente, como su nombre indica, que contiene miso como ingrediente principal. Pero como a veces me resulta complicado encontrar un miso que no sea de soja

 -el miso de arroz es buenísimo- he pensado en hacer un caldo más consistente con las shiitake para evitar la necesidad de añadir miso. Y es cierto que el aroma que va inundando la cocina promete.

La soja no es el enemigo, pero como casi todo, se ha cultivado en cantidades tan exageradamente extraordinarias y hay tal cantidad de soja transgénica -no tiene nada que ver con la soja cultivada tradicionalmente en Asia– que podría ser un alimento cero, de los que llenan el estómago y no aportan nada.

En fin, hay que valorar si lo que comemos aporta nutrientes o solo llena el estómago.

Sopa shiitake

PARA LA SOPA 

Ingredientes

Puerros

Zanahorias

Cebolleta

Pimiento verde italiano

Shiitake

Jengibre

Pimienta

Comino en polvo.

Sal

Aceite oliva VE

Fideos de trigo

Elaboración

  • Calentar el aceite 

Saltear en este orden:

  • Jengibre, sal y un poco de pimienta y comino.
  • La cebolleta. 
  • El puerro cortado en finos hilos.
  • Una parte del pimiento -reservar otra parte para decorar-.
  • Las zanahorias cortadas en finas láminas.
  • Lo último las setas y saltear solo unos segundos.

Dejar que cada ingrediente tome color antes de incorporar el siguiente.

Por último

•Añadir agua, sin exceso, solo que cubra las verduras.

•Dejar en ebullición 35´ a fuego medio.

•Añadir los fideos y dejar unos 10´más.

Los tiempos son aproximados, dependerá de la cantidad de ingredientes, del clima, de la cantidad y calidad del agua…

Con mis mejores deseos.


Prisa, prisa y más prisa

Nos aceleramos sin motivo. Tenemos la sensación de que una actividad exagerada nos da mayores resultados. Los viajes son rápidos, el enamoramiento es rápido, la cocina es rápida, queremos resultados rápidos. La vida es rápida.

Comer sano. Alcachofas moradas.

Pretendemos que nuestro cuerpo siga la dinámica marcada por la actividad mental pero el cuerpo físico marca otros tiempos: el corazón late a un ritmo pausado, la digestión es larga y la respiración es lenta.

Conclusión: nuestro cuerpo físico y el mental están desconectados. La respiración es el puente que los conecta. Sin una respiración consciente, como dijo uno de mis autores favoritos, solo queda un inhalar y exhalar de protoplasma en una oscuridad donde no llega la luz.

Con mis mejores deseos.


Los radicales libres y esas cosas que nos vuelven loc…s

Supongamos, porque un dato exacto no hay, que el cuerpo humano está formado por unos 70 billones de células. La función de cada una de estas células es absorber los nutrientes de los alimentos que comemos, del aire que respiramos  y convertirlos en energía para que el cuerpo sea capaz de realizar todas sus funciones vitales. No tener energía implica que debajo de la superficie hay mar de fondo.

Brócoli con pistachos

Estas células están a su vez formadas por partículas más pequeñas, los átomos. Los radicales libres se forman cuando el átomo no es bastante fuerte y pierde un electrón. Este electrón que anda suelto es un radical libre. Pero no acaba aquí la cosa, solo empieza, porque entonces el átomo que lo ha perdido tiene que captar otro para estar estable y completo y convierte a su vez en incompleto al que lo cede. Hay dos causas que permiten que esto ocurra:

Una interna, causada por la aceleración del metabolismo de la célula debido a enfermedades o al estrés.

Una externa como consecuencia de la radiación ultravioleta, consumo excesivo de químicos, drogas, virus, bacterias, contaminación, alimentación de escaso valor nutritivo, etc…

Pero si el sistema inmunológico es fuerte puede neutralizar los radicales libres por su sistema natural de defensa: los antioxidantes. Unos los produce el cuerpo por propia naturaleza y otros los obtenemos a través de la alimentación y de un estilo de vida saludable -respirar aire puro, movernos-. 

Algunos de los antioxidantes naturales son:

Vitamina E – La contienen aceites de semillas prensadas en frío, girasol, germen de trigo y de maíz, los cacahuetes, patatas, apio, repollo, frutas…

Vitamina C – La contienen los cítricos, papaya, kiwi, mango, mora, fresa, tomate, verduras de hoja verde brócoli y el resto de las coles.

Betacaroteno – Lo contienen verduras y frutas anaranjadas y verduras de color verde

Licopeno –  Lo contiene el tomate.

Etc, etc…

Los radicales libres no podemos eliminarlos por completo -hay que valorar el consumo excesivo de antioxidantes químicos que tomamos sin control para combatirlos- , porque nuestro cuerpo los necesita para luchar contra los virus, las bacterias y las infecciones.

El problema sería un exceso de radicales libres, por los motivos indicados anteriormente, soportado por el cuerpo durante años.

Con mis mejores deseos.


Compota de manzana, yogur y crumble de galletas

Compota de manzana, yogur y crumble de galletas

1 Ingredientes para la compota

4 Manzanas cortadas a dados 

3 c.s de panela -ampliar o reducir la cantidad según gustos, y variedad o madurez de la fruta-.

100 ml de agua

El zumo de ½ limón

Pizca de canela

Elaboración

Poner todos los ingredientes en un recipiente, a fuego bajo, unos 30´aproximadamente y reducir hasta que caramelice sin llegar a deshacerse la fruta.

2 Ingredientes para el crumble

60 g de galletas Maria trituradas

50 g de panela

40 g de harina de almendras

40 g de mantequilla a temperatura ambiente, -más bien un punto frío que blanda-.

Elaboración

Mezclar con los dedos los ingredientes, y dejar para el final la mantequilla. Debe quedar una textura arenosa. Esparcir sobre una bandeja forrada de papel de hornear durante 5´a 170º, con la bandeja en el nivel medio.

3 Yogur natural y nata montada

La nata montada va sobre el yogur sin mezclar.

4 Caramelo

Ingredientes

50 g azúcar

50 g agua

Y unas gotas de zumo de limón

Elaboración

Poner en un recipiente a fuego bajo, sin remover; si es necesario mover el mismo cazo.

Por último rellenar los vasitos.  La 1ª capa de compota, 2ª capa de yogur, 3ª capa de nata montada, y por último espolvorear con el crumble y verter el caramelo.

Darle un punto de frío antes de servir.

Con mis mejores deseos.


BRIOCHE

Salen unos 12 brioche

Brioche

Ingredientes

500 g de harina. Reserva parte de esta harina porque la necesitaras para espolvorear en el amasado.

100 g de azúcar

2 huevos de corral, si usas huevos intenta que sean de gallinas criadas en libertad con una alimentación sana.

150 ml de leche tibia

20 g de levadura fresca

35 g de mantequilla 

5 g de sal

1 huevo para pintarlos antes de meter en el horno

1 Activar la levadura fresca con parte de los ingredientes

1c.s. de azúcar 

Levadura 

1 y ½ c.s de harina

Un poco de la leche tibia 

Mezclar y dejar fermentar al menos 15´en un lugar cálido. Se levantarán burbujas y se hinchara la mezcla. Esto también te servirá para ver que la levadura está en buenas condiciones y que no arruinará la elaboración.

2 Meter en un bol

La harina tamizada

La levadura fermentada

La leche

La mantequilla pomada

A mi me gusta amasar con las manos, pero… Si la masa no pide toda la harina mejor. 

La sal se agrega cuando la masa esté hecha, no antes.

3 Dejar reposar 2 veces

La primera vez: 1 hora hasta que doble el volumen en un molde forrado con papel de hornear.

Después del reposo se vuelve a amasar.

Se forma un cilindro y se cortan bolas de 60 g.

La segunda vez: se vuelven a dejar reposar por última vez al menos ½ hora más.

Por último hornear a 180º unos 20´

Con mis mejores deseos.


Los lácteos en primavera

En primavera nos sentimos como el oso que sale de la cueva tras su periodo invernal, y si añadimos las circunstancias actuales… 


Nuestras células ante el peligro del cambio le exigen al cuerpo desintoxicación. La primavera es pues tiempo de renovar, de rejuvenecer, de eliminar lo viejo para dar paso a lo nuevo. Es el momento de desprenderse de las toxinas acumuladas en el invierno para que este periodo de transición hacia una nueva estación sea el adecuado.

En cada estación se dan cambios en los 5 elementos presentes en la naturaleza de la que somos parte. Esto influye en todo el sistema corporal y afecta entre otros al sistema digestivo. Aparecen síntomas de cansancio, pesadez, mucosidades, resfriados, embotamiento y apatía. Y más en las circunstancias actuales con la falta del aire puro, el sol, de caminar… 

De los lácteos el yogur y los quesos son los príncipes de la despensa. Somos prácticamente adictos a estos alimentos, por la facilidad y rapidez en la que están a nuestra disposición, por su sabor que es un flash en el paladar y por su efecto saciante. 

En esta época del año, cuando prima un poder digestivo generalmente débil, la verdad es que no son demasiado recomendables porque aumentan las mucosidades en garganta, pulmones y estómago además del habitual aumento de peso.

Podemos poner en práctica algunas acciones que ayudarán a minimizar estos efectos en nuestro organismo: 

Reducir la cantidad de lácteos en la dieta. 

Sustituir los lácteos por otro alimento que nos guste mucho y satisfaga el deseo.

Quitar el queso que añadimos en las elaboraciones de algunos platos y dejarlos para una comida especial una vez a la semana. 

Elaborar yogur casero que mantiene intactas sus propiedades al mantener vivas sus bacterias buenas. Y que podemos rebajar su % con leche, leche vegetal o agua elaborando bebidas como el lassi que es un magnifico sustituto del yogur completo.
El lassi es una bebida refrescante muy popular en India. Esta bebida data como mínimo del año 1000 a.c. y se tomaba a temperatura ambiente; hoy día se toma fresco. Está hecha con yogur y rebajada con leche, leche vegetal o agua; aún así mantiene el sabor a la vez que se diluye su contenido lácteo.

Lassi, bebida india

Puede ser dulce o salado. 

Cuando es saladolassi masala-  se condimenta con sal y especias en polvo: jengibre, comino y pimienta. 

Cuando es dulce lleva azúcar y pulpa de todo tipo de frutas, aunque las más populares son el mango y la papaya. Se condimenta con cardamomo o canela en polvo.

También hay lassi sin fruta y especiado con cúrcuma en polvo para evitar problemas estomacales.

Lassi, bebida tradicional india

No hay que confundirlo con el bhang lassi que está hecho a base de cannabis y se toma en algunas fiestas religiosas indias.

La proporción es de una taza de yogur por media taza de leche – se puede sustituir la leche por una leche vegetal hecha con anacardos, almendras … – Las cantidades pueden variar de más denso a más líquido dependiendo de las preferencias,.

Pon todo en la batidora y disfruta.

Con mis mejores deseos.