La alimentación Ayurveda y el Yoga te ayudan a descubrir día a día un saludable estilo de vida
Etiqueta: Alimentos naturales
Adiós a los alimentos procesados y a los envasados, tanto en plástico como enlatados. Y una bienvenida a los alimentos que crecen bajo el sol y la lluvia.
Nos aceleramos sin motivo. Tenemos la sensación de que una actividad exagerada nos da mayores resultados. Los viajes son rápidos, el enamoramiento es rápido, la cocina es rápida, queremos resultados rápidos. La vida es rápida.
Comer sano. Alcachofas moradas.
Pretendemos que nuestro cuerpo siga la dinámica marcada por la actividad mental pero el cuerpo físico marca otros tiempos: el corazón late a un ritmo pausado, la digestión es larga y la respiración es lenta.
Conclusión: nuestro cuerpo físico y el mental están desconectados. La respiración es el puente que los conecta. Sin una respiración consciente, como dijo uno de mis autores favoritos, solo queda un inhalar y exhalar de protoplasma en una oscuridad donde no llega la luz.
Supongamos, porque un dato exacto no hay, que el cuerpo humano está formado por unos 70 billones de células. La función de cada una de estas células es absorber los nutrientes de los alimentos que comemos, del aire que respiramos y convertirlos en energía para que el cuerpo sea capaz de realizar todas sus funciones vitales. No tener energía implica que debajo de la superficie hay mar de fondo.
Brócoli con pistachos
Estas células están a su vez formadas por partículas más pequeñas, los átomos. Los radicales libres se forman cuando el átomo no es bastante fuerte y pierde un electrón. Este electrón que anda suelto es un radical libre. Pero no acaba aquí la cosa, solo empieza, porque entonces el átomo que lo ha perdido tiene que captar otro para estar estable y completo y convierte a su vez en incompleto al que lo cede. Hay dos causas que permiten que esto ocurra:
Una interna, causada por la aceleración del metabolismo de la célula debido a enfermedades o al estrés.
Una externa como consecuencia de la radiación ultravioleta, consumo excesivo de químicos, drogas, virus, bacterias, contaminación, alimentación de escaso valor nutritivo, etc…
Pero si el sistema inmunológico es fuerte puede neutralizar los radicales libres por su sistema natural de defensa: los antioxidantes. Unos los produce el cuerpo por propia naturaleza y otros los obtenemos a través de la alimentación y de un estilo de vida saludable -respirar aire puro, movernos-.
Algunos de los antioxidantes naturales son:
Vitamina E – La contienen aceites de semillas prensadas en frío, girasol, germen de trigo y de maíz, los cacahuetes, patatas, apio, repollo, frutas…
Vitamina C – La contienen los cítricos, papaya, kiwi, mango, mora, fresa, tomate, verduras de hoja verde brócoli y el resto de las coles.
Betacaroteno – Lo contienen verduras y frutas anaranjadas y verduras de color verde
Licopeno – Lo contiene el tomate.
Etc, etc…
Los radicales libres no podemos eliminarlos por completo -hay que valorar el consumo excesivo de antioxidantes químicos que tomamos sin control para combatirlos- , porque nuestro cuerpo los necesita para luchar contra los virus, las bacterias y las infecciones.
El problemasería un exceso de radicales libres, por los motivos indicados anteriormente,soportado por el cuerpo durante años.
3 c.s de panela -ampliar o reducir la cantidad según gustos, y variedad o madurez de la fruta-.
100 ml de agua
El zumo de ½ limón
Pizca de canela
Elaboración
Poner todos los ingredientes en un recipiente, a fuego bajo, unos 30´aproximadamente y reducir hasta que caramelice sin llegar a deshacerse la fruta.
2Ingredientes para el crumble
60 g de galletas Maria trituradas
50 g de panela
40 g de harina de almendras
40 g de mantequilla a temperatura ambiente, -más bien un punto frío que blanda-.
Elaboración
Mezclar con los dedos los ingredientes, y dejar para el final la mantequilla. Debe quedar una textura arenosa. Esparcir sobre una bandeja forrada de papel de hornear durante 5´a 170º, con la bandeja en el nivel medio.
3 Yogur natural y nata montada
La nata montada va sobre el yogur sin mezclar.
4 Caramelo
Ingredientes
50 g azúcar
50 g agua
Y unas gotas de zumo de limón
Elaboración
Poner en un recipiente a fuego bajo, sin remover; si es necesario mover el mismo cazo.
Por último rellenar los vasitos. La 1ª capa de compota, 2ª capa de yogur, 3ª capa de nata montada, y por último espolvorear con el crumble y verter el caramelo.
500 g de harina. Reserva parte de esta harina porque la necesitaras para espolvorear en el amasado.
100 g de azúcar
2 huevos de corral, si usas huevos intenta que sean de gallinas criadas en libertad con una alimentación sana.
150 ml de leche tibia
20 g de levadura fresca
35 g de mantequilla
5 g de sal
1 huevo para pintarlos antes de meter en el horno
1 Activar la levadura fresca con parte de los ingredientes
1c.s. de azúcar
Levadura
1 y ½ c.s de harina
Un poco de la leche tibia
Mezclar y dejar fermentar al menos 15´en un lugar cálido. Se levantarán burbujas y se hinchara la mezcla. Esto también te servirá para ver que la levadura está en buenas condiciones y que no arruinará la elaboración.
2 Meter en un bol
La harina tamizada
La levadura fermentada
La leche
La mantequilla pomada
A mi me gusta amasar con las manos, pero… Si la masa no pide toda la harina mejor.
La sal se agrega cuando la masa esté hecha, no antes.
3 Dejar reposar 2 veces
La primera vez: 1 hora hasta que doble el volumen en un molde forrado con papel de hornear.
Después del reposo se vuelve a amasar.
Se forma un cilindro y se cortan bolas de 60 g.
La segunda vez: se vuelven a dejar reposar por última vez al menos ½ hora más.
En primavera nos sentimos como el oso que sale de la cueva tras su periodo invernal, y si añadimos las circunstancias actuales…
Nuestras células ante el peligro del cambio le exigen al cuerpo desintoxicación. La primavera es pues tiempo de renovar, de rejuvenecer, de eliminar lo viejo para dar paso a lo nuevo. Es el momento de desprenderse de las toxinas acumuladas en el invierno para que este periodo de transición hacia una nueva estación sea el adecuado.
En cada estación se dan cambios en los 5 elementos presentes en la naturaleza de la que somos parte. Esto influye en todo el sistema corporal y afecta entre otros al sistema digestivo. Aparecen síntomas de cansancio, pesadez, mucosidades, resfriados, embotamiento y apatía. Y más en las circunstancias actuales con la falta del aire puro, el sol, de caminar…
De los lácteos el yogur y los quesos son los príncipes de la despensa. Somos prácticamente adictos a estos alimentos, por la facilidad y rapidez en la que están a nuestra disposición, por su sabor que es un flash en el paladar y por su efecto saciante.
En esta época del año, cuando prima un poder digestivo generalmente débil, la verdad es que no son demasiado recomendables porque aumentan las mucosidades en garganta, pulmones y estómago además del habitual aumento de peso.
Podemos poner en práctica algunas acciones que ayudarán a minimizar estos efectos en nuestro organismo:
Reducir la cantidad de lácteos en la dieta.
Sustituir los lácteos por otro alimento que nos guste mucho y satisfaga el deseo.
Quitar el queso que añadimos en las elaboraciones de algunos platos y dejarlos para una comida especial una vez a la semana.
Elaborar yogur casero que mantiene intactas sus propiedades al mantener vivas sus bacterias buenas. Y que podemos rebajar su % con leche, leche vegetal o agua elaborando bebidas como el lassi que es un magnifico sustituto del yogur completo. El lassi es una bebida refrescante muy popular en India. Esta bebida data como mínimo del año 1000 a.c. y se tomaba a temperatura ambiente; hoy día se toma fresco. Está hecha con yogur y rebajada con leche, leche vegetal o agua; aún así mantiene el sabor a la vez que se diluye su contenido lácteo.
Lassi, bebida india
Puede ser dulce o salado.
Cuando es salado –lassi masala- se condimenta con sal y especias en polvo: jengibre, comino y pimienta.
Cuando es dulce lleva azúcar y pulpa de todo tipo de frutas, aunque las más populares son el mango y la papaya. Se condimenta con cardamomo o canela en polvo.
También hay lassi sin fruta y especiado con cúrcuma en polvo para evitar problemas estomacales.
Lassi, bebida tradicional india
No hay que confundirlo con el bhang lassi que está hecho a base de cannabis y se toma en algunas fiestas religiosas indias.
La proporción es de una taza de yogur por media taza de leche – se puede sustituir la leche por una leche vegetal hecha con anacardos, almendras … – Las cantidades pueden variar de más denso a más líquido dependiendo de las preferencias,.
La avena ha pasado en los últimos años de los sacos de piensos para caballos a envasarse en bolsas para el supermercado, y de allí a nuestras mesas.
Estamos rescatando viejos cereales para ampliar la diversidad alimentaria, pero ¿los consumimos de forma adecuada?
Breve historia de la avena
Los caballos han comido avena salvaje desde tiempos inmemoriales.
En época de los romanos llamaban a las tribus celtas y al pueblo caledonio -antiguo nombre de Escocia-, en sentido peyorativo “comedores de avena”, porque la consideraban una mala hierba solo útil para comida de caballos. En Escocia y otros países del norte, se siguió comiendo avena porque daba la energía suficiente para soportar las duras jornadas de trabajo en esas tierras inhóspitas a muy bajas temperaturas. Con ella se alimentaba también a los reclusos en las cárceles británicas y elaboraban whisky.
A pesar de ser de cultivo fácil y económico la avena ha sido uno de los últimos cereales en empezar a cultivarse.
Gachas o “porridge”
La avena se prepara tradicionalmente cocida, en forma depapilla con leche y sal. Este era el modo de consumir los cereales hasta que aparecieron los hornos.
En la actualidad, desafortunadamente, la sal ha sido sustituida por azúcar; que parece más adecuado a nuestras costumbres. Y se hidrata solo con un poco de leche caliente.
La imagen nº1 presenta unos granos de avena pelados y enteros que necesitan estar a remojo toda la noche para ser cocidos al día siguiente y hacerlos digeribles.
La imagen nº 2 muestra avena pre cocida, para conseguir un formato del grano laminado y que sea más fácil de usar; pero aún le falta la última cocción. En este punto aún no se han cocido bien los almidones por lo que hay que cocerla de nuevo.
¿Qué aporta nutricionalmente la avena?
La avena se enrancia con facilidad si en el proceso de almacenamiento no se mantienen los parámetros adecuados de la humedad del grano.
Si la comparamos con el resto de cereales, como puede ser el arroz, la avena tiene más fibra, más proteína y más calcio. Pero esto lo tiene en su estado puro, cruda. Para poder absorber estos nutrientes la avena ha de estar cocida. Pero al cocerla, cosa absolutamente necesaria, pierde parte de estos nutrientes y se pone prácticamente al nivel del resto de cereales.
El ácido fítico que contiene – también lo contienen otros pseudocereales y cereales integrales- puede crear deficiencias de minerales como hierro, zinc, calcio…, porque impide que nuestro cuerpo pueda absorberlos.
COCIDA Sí O Sí
Tal como sale del paquete le añadimos leche caliente o fría, y listo. ¿Comerias arroz laminado o en copos seco y crudo, solo con un poco de leche por encima?
El modo tradicional, más sano y adecuado de preparación de la avena es en gachas
Si el grano está entero como en la foto 1:
Se hierven los granos con 3 veces más de agua durante 90´ hasta que se hinchen. Se aplastan y cuando se sequen estarán listos para la cocción normal, para moler y hacer harina o para hacer leche de avena. Con lo que habrá una segunda cocción.
Agua de avena
4 cdas de avena y 2 litros de agua que se dejan reducir hasta que quede solo 1 litro.
Gachas o porridge
Así se tomó a lo largo de siglos, solo en los últimos 60 años de desatinos alimenticios somos capaces de tomarla cruda.
Ingredientes
110 g de copos de avena
275 ml de agua o leche o una mezcla de las dos
Sal
Cocer a fuego bajo y lento, para evitar grumos, hasta que se haga una papilla. La papilla se cuece durante unos 5´ moviendo para evitar que se pegue en el fondo.
Añadir un poco de gomasio (sésamo y sal) , modo en que las preparan los japoneses y, es especialmente saludable ya que el sésamo aporta la parte de proteína que pierde la avena al cocinarse.
Consumir avena de manera inadecuada puede traer consecuencias
Muy pocos estudios han evaluado el efecto de la avena en las funciones intestinales. Sí es rica en fibra; da un efecto saciante y aumenta el volumen y el peso de las heces. Aunque esto parece no ser solo específico de la avena sino de los cereales en general.
Cuando se pasa de una dieta falta de fibra a una dieta rica en fibra se ha de hacer paulatinamente empezando con pocas cantidades para que el cuerpo la vaya asimilando. Si no se asimila genera gases que quedan retenidos y producen hinchazón abdominal.
Aunque las cantidades de gluten son mínimas respecto al resto de cereales, la avenina que contiene puede crear alguna reacción en los celíacos.
Los enfermos de Crohn y de enterocolitis deberían evitar el salvado de avena porque los inhibidores enzimáticos se unen a las enzimas digestivas y disminuyen su actividad (como la de eliminar microorganismos patógenos que provocan las enfermedades).
Nada se puede considerar alimento si no somos capaces de digerirlo.
“El alimento es la vida de todos lo seres. La piel, la voz, la satisfacción, la inteligencia, el crecimiento, la fuerza, todo se fundamenta en el alimento”. Caraka -médico ayurveda-.
Combinar el sabor de los vegetales mediterráneos con el sabor exótico del coco, da como resultado este plato de un sabor exquisito.
Vegetales y coco
Ingredientes para la leche de coco
900 ml de agua mineral 200 g de Coco
Ralla el coco primero si no tienes un batidor potente.
Pon en la batidora el coco rallado con el agua caliente -le sacará más sabor al coco- y deja batir unos minutos. Cuela si es necesario y reserva.
Ingredientes para la sopa
1 zanahoria grande 1 berenjena 1 lemongrass 2 nabos medianos 1 patata pequeña 1-2 hojas de acelgas o de pak Choi 1 puerro cortado a tiras finas Cilantro fresco
Chaska los nabos y las patatas en trozos pequeños. Corta la zanahoria, la berenjena y las hojas de acelga o de pak Choi.
Haz un sofrito con los puerros y ve incorporando el resto de los vegetales, empezando por las berenjenas.
Añade unas cucharadas de agua y deja pochar unos 5 ́
Añade la leche de coco. Deja la cocción unos 30 ́ a fuego lento vigilando que no espese en exceso.
Al servir espolvorea con unas hojas de cilantro fresco.
Ingredientes para los chapati
250 g harina integral o mitad y mitad 5 g de aceite oliva 100 ml de agua tibia Pizca de sal
Nuestra hora de la comida en el ashram. Vrindavan-India-
En un bol mezcla el aceite y el agua e incorpora la harina con la sal. Se mezcla, no se amasa, para formar una masa elástica que se ha de dejar descansar tapada unas horas, o dejarla hecha la noche anterior.
Se amasa de nuevo unos 3 ́ y se separan porciones del mismo peso para hacer bolitas. Se estiran las bolas con un rodillo hasta tener una superficie de unos 12 cm y de unos 3mm de grosor.
Pon a calentar una sartén -si es de hierro mejor, por el fondo grueso- a fuego medio. Cuando la masa empieza a hincharse en el centro y se vuelve tostada -aproximadamente en un minuto- se da la vuelta por el otro lado. El resultado es una tortita suficientemente flexible para que se pueda doblar.
Envolverlos en un paño de cocina seco hará que se conserven blandos.
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